Se conoce como presión arterial alta o Hipertensión arterial
(HTA) a un aumento sostenido –por encima de los valores esperados- de la fuerza
que ejerce la sangre sobre las paredes arteriales al viajar a través de ellas.
Cuando se mide la presión arterial se suministran dos
cifras: la sistólica y la diastólica. La sistólica es la mayor presión que se
trasmite por las arterías (y se conoce así por la concentración o sístole, del
corazón). Es la más elevada de las dos medidas, mientras la diastólica, es la
menor, y se refiere a la diástole (o relajación del corazón).
Seguramente la característica más grave de la Hipertensión
arterial (HA), es su condición de silenciosa. Sus efectos se producen durante
años en órganos vitales sin que ofrezca síntomas.
Bajo su efecto se pueden comprometer el normal
funcionamiento de órganos como el corazón, el cerebro, los riñones, los
pulmones y los ojos.
Se habla de HA cuando se presentan cifras de tensión
(también llamada presión) arterial por encima de un valor que se sitúa en
140/80 mmHg. Asímismo, se conoce como normotensos a quienes tienen valores normales
de tensión y son clasificadas en este grupo aquellas personas son tensión
inferior a 140/mmHg. Mientras ya se consideran hipertensos a las personas con
presión arterial superior a 140/80 mmHg.
La presión o tensión arterial puede variar en diferentes momentos,
lugares y circunstancias, de allí que la medición aislada no significa que se
padezca HTA.
En 9 de cada 10 casos su aparición es de causa desconocida,
pero como en muchas enfermedades mientras más temprano pueda atacarse mejores
serán las perspectivas para el paciente.
Alimentación en HTA
A quienes se les ha diagnosticado HTA se les indica un
cambio en su dieta que no siempre está muy claro. Aquí anexamos una lista de
alimentos que están permitidos, los que se deben comer con moderación y los que
no se deben ingerir.
Alimentos aconsejados
Lácteos y sus derivados: leche, cuajada, yogur y otras
leches fermentadas preferiblemente no azucaradas y quesos.
Carnes, pescado, huevos y sus derivados: preferir las carnes
que menos grasa contiene.
Cereales, papas y legumbres: todos salvo los indicados en
“alimentos limitados”.
Verduras y hortalizas: todas, y es aconsejable comer una
ensalada de vegetales crudos a diario.
Frutas: todas salvo las indicadas en el apartado de
“alimentos limitados”.
Bebidas: agua, infusiones y jugos, bebidas refrescantes no
azucaradas.
Grasas: aceites de oliva y semillas (girasol, maíz, soja…)
mantequilla, margarinas vegetales
Alimentos de consumo ocasional
Leche y lácteos: batidos lácteos, yogures azucarados,
natilla y flan.
Carnes semigrasas
Cereales: cereales de desayuno azucarados (sencillos,
chocolateados, con miel).
Bebidas: jugos comerciales azucarados.
Otros productos: miel, mermeladas, pan y reposterías
sencillas, helados y mayonesa.
Alimentos de consumo limitado
(consumir en pequeñas cantidades y de forma esporádica).
Leche y lácteos: leche condensada
Carnes: carnes grasas, productos de charcutería y vísceras.
Cereales: galletas rellenas o cubiertas de azúcares.
Frutas: fruta en almíbar o confitadas.
Bebidas: a base de cola y azucaradas, bebidas alcohólicas de
baja graduación (como cerveza y vinos).
Grasas: nata, manteca, tocino y tocineta.
Otros productos: pastelería y repostería rellena, o bañadas
en soluciones dulces. Edulcorantes: azúcar común o sacarosa, fructosa y jarabes
de glucosa.
Qué hacer ante diagnóstico de
hipertensión
Si el médico le ha diagnosticado Hipertensión Arterial,
deberá asumir cambios en su estilo de vida y nuevas rutinas, que junto al
chequeo periódico le podrían mantener lejos de las estadísticas de accidentes
cerebro-vasculares e insuficiencia cardíaca:
- Su médico le indicará la medicación adecuada para su forma
y severidad de HA. Ese medicamento deberá tomarlo bajo supervisión y por el
resto de su vida. Si al tomar el medicamento controla su HA recuerde que no debe suspenderlo porque podría
volver a aumentar e incluso situarse por encima de los valores que inicialmente
le fueron diagnosticados.
- Tome la dosis recomendada por su médico. No la disminuyan
o aumente si siente cambios en su condición.
-Asocie la toma de su pastilla para la HA a una rutina
diaria que le garantice no olvidarla. Por ejemplo tómela con el desayuno o al
despertar.
-Reduzca su consumo de sal a 4 – 6 gramos al día.
-Si tiene sobrepeso pídale a su médico orientación para
seguir una dieta que le permita alcanzar un peso adecuado a su talla.
-Disminuya el consumo de alcohol (el máximo para las mujeres
debe ser a 140 gramos a la semana y 210 en el caso de los hombres).
-Realice algún ejercicio físico acorde a su condición de
salud, por lo menos media hora tras veces a la semana.
-Abandone el hábito de fumar.
Además de las medidas recomendadas, el hipertenso dispone de
una amplia variedad de fármacos que le permita controlar la enfermedad. El
tratamiento debe ser siempre individualizado.
Fuente:
Cortesía de
Boehringer Ingelheim. El Nacional 21 de julio 2015.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario