Para mejorar el rendimiento deportivo se consideran muchos factores (genética, estado de salud/enfermedad, lesiones, psicología, entrenamiento, descanso, alimentación, ambiente familiar/laboral/deportivo, material/ instalaciones, etc.).
De los factores externos y que pueden condicionar ese
rendimiento, uno de los principales es la periodización nutricional y de adaptación
al entrenamiento. Así, la alimentación es muy importante en la composición
corporal, suministro de energía, y en la búsqueda de una “mejora extra”, muchas
veces buscando suplementos más que alimento.
Sin embargo, la evidencia científica no siempre los apoya por no estar suficientemente avalados y ser equívocos, dejando al margen obviamente, lo que sea ilegal y atente contra la salud, como recogen las normas anti-dopaje.
Basándonos en el análisis de la evidencia del efecto ergogénico (que suele clasificarse como: bien establecido, equívoco, emergente), y a partir de lo señalado por el AIS (Australian Institute of Sports) quien los cataloga como “grupo de Evidencia B”. Existen otras clasificaciones que se dividen, normalmente, en 3 grupos similares a los 4 del AIS, dejando al margen el D o de sustancias prohibidas.
Estos suplementos se permiten con deportistas por haberse sometido a investigación científica o bajo situaciones de monitorización clínica, o han proporcionado datos preliminares que sugieren posibles beneficios. Tienen un nivel de evidencia emergente, pudiendo preservar el buen estado de salud, mejorar el rendimiento o ayudar en la recuperación, lo que hace que sean de particular interés para deportistas y entrenadores.
Así mismo, pueden pasar al grupo A (efecto positivo
demostrado), como les ocurrió recientemente a la beta-alanina y al zumo de
remolacha.
En las últimas revisiones sobre la evidencia de los suplementos ergonutricionales emergentes para establecer como definitiva, o no, su recomendación de uso en deportistas para mejora del rendimiento y de su salud.
Para ello se realizó un análisis de las revisiones sistemáticas (RS), además de una búsqueda manual de aquellas citas relevantes (RCTs/ECA) relacionadas con esta temática, principalmente, de la base de datos PubMed. Se incluyeron aquellas revisiones más actuales, que realizaban un análisis basado en la evidencia sobre la sustancia en sí, en forma de revisión sistemática, no narrativas, sin límites en el idioma, año, estado o accesibilidad de la publicación.
Los resultados arrojan más de 16 revisiones encontradas con la metodología empleada, divididas por subcategorías del grupo B. Entre los polifenoles alimentarios, la quercetina destaca con un 2,8% de aumento de rendimiento frente a un 1,9% del resto de polifenoles analizados. Del zumo de cereza ácida no existen RS, como tampoco del Goji o Açai.
La curcumina, por sus polifenoles y propiedades
antioxidantes/antiinflamatorias, tiene una RS realizada sobre la osteoartritis,
siendo más efectiva que el placebo, y similar a los AINEs, en la mejora
funcional y alivio del dolor. En la subcategoría de otros, entrarían las
vitaminas antioxidantes C y E, de los más utilizados, pero no por ello
efectivos, encontrándose 4 RS analizando la mejora en bronconconstricción y
asma inducidos por ejercicio.
La carnitina tiene dos únicas revisiones, pero positivas y significativas, en pacientes con claudicación al caminar. El HMB cuenta con 4 RS, tres a favor (daño, fuerza y masa muscular) y una en contra.
Por ejemplo. Cuando un deportista entrenado se somete a un ejercicio intenso o diferente al habitual, se incrementa el daño muscular. El aumento de la frecuencia también puede producir este efecto. Desde que se produce el daño muscular, el organismo inicia una repuesta fisiológica para compensar el daño muscular de forma que permita recuperarse lo antes posible ante una nueva sesión de ejercicio. El HMB (b-hidroxi b-metilbutirato) es un metabolito de L-leucina, aminoácido esencial el cual junto a L-valina y L-isoleucina forman parte de los conocidos aminoácidos ramificados. La Ingesta de HMB da como resultado un equilibrio neto positivo del recambio de proteínas del músculo esquelético y la atenuación de la degradación de proteínas.
Por otra parte, recientemente, una RS le atribuye a la glutamina mejora en la reducción de peso, número de neutrófilos y aumento de la glucemia tras el ejercicio, pero con 4 RS que no apoyan claramente sus beneficios sobre fuerza muscular, composición corporal o sistema inmune. Con varias revisiones de la literatura, pero ninguna sistemática, no existe evidencia a favor de los n-3 AGPI (Ácidos Grasos Poliinsaturados) en el rendimiento deportivo, aunque sí de aspectos relacionados (salud y composición corporal: pérdida de peso y dislipemia).
No existen RS o RCTs hasta la fecha de la glucosamina, salvo sobre la función y el dolor a medio-plazo en la osteoartritis. No existen RS específicas de Zinc y mejora del rendimiento, aunque sí cómo cambian sus niveles sanguíneos con y tras el ejercicio aeróbico, y como en deportistas se encuentra una cantidad sérica menor (−0,9μmol/L), a pesar de una ingesta mayor que los no deportistas (2,6mg/día).
En este grupo de evidencia B del AIS, aunque se podrían encuadrar otros muchos, se integran, fundamentalmente, polifenoles alimentarios y otras sustancias de diferente origen, pero incidiendo casi todas en una supuesta mejor recuperación del daño muscular, capacidad antioxidante y antiinflamatoria, sistema inmune y percepción del dolor.
Sin embargo, salvo en ciertas ayudas, no se cuenta con
suficiente evidencia, con escasas revisiones sistemáticas que analicen
fehacientemente los estudios en curso y RCTs/ ECA hasta la fecha, como para
poder pasar al grupo A, incluso alguno con posibilidad de engrosar el grupo.
Otros suplementos necesitan también más investigación para empezar a
considerarse de estos grupos de evidencia emergentes (citrato sódico, fosfatos,
grosella negra, piña/bromelina, granada, sandía/citrulina, ginger, ginseng,
Rhodiola rosea, etc.).
Fuente:
Raúl
López-Grueso (2019). Presentación de
todas las pruebas científicas en la efectividad de ayudas ergonutricionales
para mejorar el rendimiento y salud de deportistas: revisión de revisiones
sistemática.
Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7025654
Alejandro
Martínez-Rodríguez (2019). Últimos
descubrimientos en la utilización de ayudas ergonutricionales en el deporte:
investigación basada en la evidencia en deportes de combate.
Disponible: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7025689
Infisport
(2019). Para qué sirve el suplemento HMB.
Disponible
en: https://www.infisport.com/blog/para-que-sirve-el-suplemento-hmb
No hay comentarios.:
Publicar un comentario