Al
disminuir las reservas de glucógeno, se utilizan los lípidos como combustible,
aumentando el nivel sanguíneo de ácidos grasos. Los niveles de insulina y
glucemia disminuyen junto con otros cambios metabólicos favoreciendo la
movilización de la grasa adipositaria merced predominio neuroendocrino de la actividad simpática. En
la edad infantil se aprecia una caída más rápida en los niveles de glucemia en
relación con una persona adulta.
El
desayuno reorienta el perfil metabólico del organismo, aumenta la secreción de
insulina, utilizándose otra vez como sustrato energético prioritario los
glúcidos y favoreciendo la lipogénesis y el predominio parasimpático.
La
ausencia del desayuno hace que estos cambios homeostáticos se prolonguen
durante la mañana y pueden reflejarse en una disminución de algunas capacidades
cognitivas. La función cerebral puede ser más vulnerable en los niños, ya que
algunas facultades cognitivas están en proceso de maduración, y en las personas
mayores están en declive.
El
desayuno es la primera comida que se utiliza para interrumpir el ayuno
nocturno. Generalmente se ingiere en las primeras horas del día y su contenido
en alimentos varía de acuerdo a los diferentes hábitos alimentarios individuales y poblacionales.
Si
no desayunamos: (a) se utilizan los lípidos como
combustible, (b) aumentan los ácidos grasos en sangre, (c) disminuyen los
niveles de insulina y glucemia, (d) se favorece la movilización de la grasa de
los adipositos, (e) se perjudica el rendimiento físico e intelectual.
Si
desayunamos: (a) se utilizan los azúcares como combustible, (b) disminuyen los ácidos
grasos en sangre, (c) aumentan los niveles de insulina y glucemia, (d) se retrasa la movilización de la grasa de los
adipocitos, (e) se favorece el rendimiento físico e intelectual.
Importancia del desayuno
La
edad escolar constituye un proceso estable en cuanto al crecimiento y al
desarrollo de los alumnos. En esta etapa, la alimentación debe proporcionar un
balance positivo de nutrientes estructurales con el fin de satisfacer la
acumulación de energía que precede al brote puberal.
También
tiene que permitir realizar un importante nivel de actividad física y ser
adecuada para que el niño desarrolle satisfactoriamente sus actividades
escolares y sociales.
La
desnutrición crónica de grado medio está asociado a varios trastornos
cognitivos y de comportamiento a lo largo de las etapas de la vida. Así, varios
autores describen cómo influye el ayuno y la desnutrición severa en el
rendimiento físico e intelectual infantil y adolescente.
Múltiples
estudios epidemiológicos demuestran que la omisión del desayuno afecta
perjudicialmente a la función cognitiva de la población infantil y que los
niños con desnutrición son, probablemente, los más afectados.
El
ayuno durante la mañana produce efectos adversos como, por ejemplo, recordar
una lista de palabras y leer un relato en voz alta. Se ha demostrado que el
consumo del desayuno influye específicamente en aquellas tareas que requieren
el uso de la memoria. Esta influencia se realiza a través de varios mecanismos,
entre ellos, un incremento del nivel de glucosa en sangre.
Las
repercusiones del ayuno nocturno y la
omisión del desayuno, especialmente entre los niños con riesgo de padecer
problemas nutricionales, producen estímulos más lentos, aumentan los errores y
ralentizan los recuerdos.
Por
lo tanto, la ausencia del desayuno interfiere en los procesos cognitivos y de
aprendizaje, efecto que es más pronunciado en los niños nutricionalmente en
riesgo. Además, el desayuno beneficia ciertos factores positivos para el
alumnado, tales como asistencia a clases, el expediente académico y el estado
nutricional. Está demostrado que el desayuno escolar proporciona beneficios
educativos a largo plazo.
Por
todo ello, en situaciones de bajo nivel socioeconómico y en épocas de gran
necesidad se han desarrollado diferentes programas a través de los cuales se aportan a los niños
que lo necesitan un desayuno en el comedor escolar. En muchos países se han
obtenido importantes éxitos. Ciertos programas de desayuno escolar se
relacionan con mejoras en la ingesta nutritiva y en una reducción de los
retrasos y ausencias.
Fuente:
Carlos
Iglesias Rosado (2012). La nutrición y el comedor: su importancia contrastada
sobre el rendimiento escolar. En Nutrición
y Alimentación en el ámbito escolar. Jesús Román Martínez Álvarez (Editor).
Cap 3, p.37-44. España.
Excelente información. Me gustaría saber mas acerca de los procesos metabólicos y los mecanismos de utilización de energía en el organismo.
ResponderBorrarSaludos cordiales estimado Sr Velasco, henor abordado algunos temas al respecto. Estaremos preparando un artículo en especial sobre el tema. Estaremos al pendiente. Gracias
BorrarEl desayuno como sabemos es la comida más importante del día, esta nos brinda los nutrientes, vitaminas y minerales necesarios para que mantengamos unos altos niveles de energía física y mental para todo el día. Angiluz Rendón
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