La alimentación es
imprescindible en el desarrollo de la vida. Conocer la composición de los
alimentos y su preparación es fundamental para evitar el consumo de ciertos
componentes que generan algunas de las afecciones de salud más importantes,
tal como sucede con el consumo de los ácidos
grasos trans. Para conocer un poco más sobre la constitución y cómo
funcionan, en este artículo se parte del conocimiento de la estructura de los
ácidos grasos.
Se presentan dos tipos de
ácidos grasos: ácidos grasos cis (los cuales son los más comunes y son
hallados en los alimentos) y los ácidos grasos trans. La definición cis y trans vendría dada de cómo se distribuyen los grupos funcionales
alrededor del doble enlace.
Efectos de los ácidos trans
• Sobre los lípidos sanguíneos, producen:
a) aumento del colesterol LDLc, conocido como “colesterol malo”, el que
deposita colesterol en las arterias; b) disminución de colesterol HDLc,
conocido como el “colesterol bueno”, este es el que remueve el colesterol malo de las arterias; y
c) aumento de triglicéridos y aumento de los niveles de Lp(a), que es una
lipoproteína aterogénica, trombótica y protrombótica.
• La presencia de ácidos grasos (de 4 a 5
g) en la dieta aumenta el riesgo de incidencia de cardiopatía isquémica en
25%, y si se usa como calorías, existe más o menos, la misma incidencia de
cardiopatía isquémica.
• Aumentan el proceso inflamatorio, debido
a que aumenta la interleuquina 6, que aumenta la síntesis de factores de
coagulación en el hígado.
• Aumentan los receptores del factor de
necrosis tumoral (TNF), factor que tiene que ver también con los procesos
inflamatorios.
• Aumentan las reacciones alérgicas.
• En un estudio reciente, donde se mide la capacidad de dilatación de las arterias, se ha
encontrado que cuando las dietas contienen ácidos grasos trans, la vasodilatación
del flujo de la arteria braquial disminuye en 29%, incluso más, que si se
utilizan ácidos grasos saturados.
• Compiten por las enzimas encargadas de
la síntesis de ácidos grasos esenciales poliinsaturados. Hay un bloqueo
aparentemente de la delta-6 - desaturasa, que es la que va a formar los ácidos
grasos esenciales.
• Suprimen la actividad de la colesterol
acetil transferasa (LCAT), de tal manera que el colesterol aumenta muy rápido
dentro de la célula y por lo tanto, se expresan menos receptores para eliminar
el colesterol de la circulación.
• Sobre el metabolismo de los
carbohidratos, aumenta el riesgo de la diabetes mellitus, porque aumentan la
resistencia a la insulina.
• La consecuencia final de todos estos
fenómenos es la enfermedad más frecuente en el mundo occidental: la
aterogénesis, la cual es un proceso inflamatorio crónico relacionado con un
acumulo de lípidos, entre los cuales ya hemos mencionado a la LDLc.
Fuentes de los ácidos grasos trans
• El calentamiento de los aceites para
freír por encima de los 180 °C. Esto no ha sido bien evaluado en nuestro
medio, ya que en las ventas ambulantes de comidas esos aceites suelen ser
reutilizados muchas veces.
• Durante la desodorizacion de los aceites
comestibles se producen ácidos grasos trans. Este es un proceso industrial
prácticamente inevitable.
Productos que contienen AGT (ácidos grasos
trans)
• Comidas rápidas.
• Cotufas para microondas.
• Productos de pastelería.
• Margarinas.
Recomendaciones
de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial
de la Salud (OMS) en relación a los AGT
• Límite máximo de < 5% en otros
alimentos
• Incluir el contenido de AGT en el
etiquetado de los alimentos.
• Informar la composición de ácidos
grasos, incluyendo AGT en comidas ofrecidas en lugares públicos (restaurantes,
comedores escolares y otros servicios de alimentación).
Los análisis hechos en el
laboratorio sobre la composición de los ácidos grasos trans, han determinado
que en el porcentaje de ácidos grasos trans por cantidad de comida analizada,
los valores están casi todos por debajo del 5% de lo que se había estipulado
inicialmente. Por otro lado, algunas galletas, por ejemplo, llegan a tener
valores desde 17% a 10%. Esto evidencia que es muy variable la cantidad de
ácidos grasos trans.
La forma de representación “trans más saturados” es interesante porque, la industria, para poder corregir la cantidad de ácidos grasos trans, ha tenido que aumentar un poco los saturados. De tal manera, que el efecto beneficioso de reducir los trans, en parte, está siendo afectada por el hecho de aumentar los saturados. Esos son métodos que utiliza la industria, para dar la consistencia que tienen las margarinas y cualquier otra grasa que se emplea en la elaboración de comidas. En comidas rápidas, la cantidad de trans puede llegar al 15,23% y hasta 24%, es decir, es muy variable.
La forma de representación “trans más saturados” es interesante porque, la industria, para poder corregir la cantidad de ácidos grasos trans, ha tenido que aumentar un poco los saturados. De tal manera, que el efecto beneficioso de reducir los trans, en parte, está siendo afectada por el hecho de aumentar los saturados. Esos son métodos que utiliza la industria, para dar la consistencia que tienen las margarinas y cualquier otra grasa que se emplea en la elaboración de comidas. En comidas rápidas, la cantidad de trans puede llegar al 15,23% y hasta 24%, es decir, es muy variable.
La intervención, el seguimiento y las
medidas que ha tomado la Organización Mundial de la Salud (OMS), han hecho que
la industria comience a reformular sus productos. Por ejemplo, dos marcas de
margarina analizadas en el año 2007, tenían casi 10% de trans. Los análisis
realizados tres años después indicaron una reducción importante de los ácidos
grasos trans hasta niveles normales. Son considerados libres de trans, porque
es muy difícil tener una comida completamente libre de trans.
Uno de los objetivos de los análisis que
se realizan en la Sección de Lipidología de la Universidad Central de Venezuela
(UCV), es que se hace el seguimiento de los diferentes productos que están en
el mercado. Los estudios al respecto permiten apreciar cómo los valores antes
de tomar las medidas para la reducción de ácidos grasos trans, y lo que ha
ocurrido recientemente: han ido cayendo los valores en los diferentes
alimentos. Esta evaluación se realizó en unos 60 productos de venta en los
supermercados; lo importante es que cayó el contenido de trans de 2,1% a 0,3%.
Ahora bien, si actualmente la tendencia es disminuir los ácidos grasos trans en los productos de ventas comerciales, esta disminución también debe reflejarse en la preparación de las comidas. Los ácidos grasos trans en la comida de los restaurantes y en los productos trans que se utilizan en ellos también cayeron. Por ello, es de esperar en un futuro, todos los productos que se analicen puedan estar por debajo del límite aceptado por la OMS.
Fuente
Iván
Golfetto (2012). Consumo
de ácidos grasos trans en Venezuela: presente y futuro
CANIA. Año 14. Nº 24. P, 4-9
Muy interesante este artículo, la información sobre el consumo de grasas es muy valioso porque en la actualidad hay muchos productos que las contienen, por eso hay que estar alerta a leer las etiquetas de los alimentos antes de consumirlos
ResponderBorrarMuchas gracias por sus comentarios. Puede acceder al artículo en extenso y otras informaciones a través del boletín de CANIA. Estamos a la orden
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