Una de las recomendaciones universales para una
alimentación y nutrición adecuada es que los individuos deben seguir una dieta
balanceada y variada, con presencia de todos los grupos de alimentos en
proporciones adecuadas.
Con
respecto a un importante grupo como las frutas y hortalizas (F&H),
principales aportantes de micronutrientes (vitaminas y minerales), fibra y de
antioxidantes que actúan como factores de protección de enfermedades crónicas
como cáncer, diabetes, enfermedad cardiovascular, etc., la recomendación de la
Organización Mundial de la Salud es consumir idealmente cinco (5) porciones.
Esta recomendación ha hecho popular mundialmente el lema ¨5 al día¨ para promover el consumo en la proporción adecuada.
La
promoción de consumo de F&H la hacen los gobiernos a través de sus
ministerios de salud e institutos de nutrición, pero también, la OMS y la FAO
han exhortado a la constitución de grupos interdisciplinarios de ciudadanos y
entidades (organizaciones de la sociedad civil, ONGs, industria de alimentos,
asociaciones de productores, etc.), dispuestos a colaborar con las políticas de
salud nacionales a través de campañas para la promoción al consumo de F&H.
La Alianza
Internacional de Asociaciones y Movimientos 5 AL DÍA (AIAM5), es un foro de
colaboración internacional que agrupa a entidades nacionales, en su mayoría
denominadas “5 al día”. Cuenta en la actualidad con 34 países de cuatro
continentes abocados a esta misión. La Fundación ¨5 al día¨ Venezuela forma
parte de la Alianza.
Venezuela,
como muchos países tropicales, paradójicamente, ha sido tradicionalmente un
país con bajo consumo por razones culturales, hábitos alimentarios, prejuicios,
ignorancia, occidentalización de la dieta, altos precios de los productos
agrícolas, etc.
De
acuerdo a la Encuesta Nacional de Consumo de Alimentos, ENCA, abril-junio de
2013, del Instituto Nacional de Estadística (No. 2, 2014), el último dato
oficial del consumo diario promedio de F&H es: 150,36 g/ día
(frutas: 108,13 g, hortalizas: 42,23 g).
Esto
es bastante bajo al considerar la recomendación de 400 gramos e incluso, de 600
gramos, repartidos en las 5 porciones. Esto ya era bajo en tiempos de mayor
“normalidad” económica y alimentaria, y es fácil inferir que el consumo
haya bajado en estos tiempos de crisis aguda.
Ya en
el año 2017, la Fundación “5 al día Venezuela” reportaba lo siguiente a los
afiliados de AIAM5:
En el año 2016 ocurrió un
cambio abrupto en el patrón alimentario de los venezolanos con las hortalizas y
tubérculos desplazando las proteínas de alto valor biológico. Las frutas
sólo son compradas por los “no pobres” y dado que las fuentes de proteínas, las
harinas, los cereales y las legumbres son de difícil acceso, la gente se ha
volcado hacia las frutas de temporada como una solución para satisfacer el
hambre, especialmente el mango. Las frutas siguen siendo costosas, pero están
disponibles y son gratis si crecen silvestres y la gente puede cosecharlas.
Los
resultados de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (ENCOVI, 2017) mostraban
el deterioro de la dieta tradicional en cuanto a calidad y cantidad. El
patrón dietario determinado por ENCOVI basado principalmente en cuatro tipos de
alimentos indica una dieta de alarmante monotonía, muy lejos de las pautas
dietarias de los países occidentales o de América Latina que exigen “una dieta
variada”.
Se
acepta que un patrón normal de consumo de alimentos consiste en al menos 20
alimentos distintos consumidos por día. De acuerdo con ENCOVI 2017-2018, el
patrón alimentario en términos de la intención de compra de los venezolanos, se
enfoca en tubérculos, cereales en forma de maíz o pan, y queso, así como azúcar
y grasas, que han sustituido a los productos con alto valor nutritivo, como el
pollo, los huevos, la carne de res, los cereales enriquecidos y las verduras.
En
consecuencia, se ha reducido el aporte de proteínas de alto valor biológico,
hierro, zinc, vitaminas A y complejo B, agravado por la disminución del aporte
de harina de maíz, sustituida por una importada no enriquecida como exigen las
regulaciones nacionales.
A esto
se suma la continua disminución en el aporte de lácteos, y los pocos que hay,
pueden no ser de buena calidad, con una composición disminuida de proteínas,
calcio y ácidos grasos, característicos de la leche, y la casi desaparición de
las frutas y hortalizas.
Si
unimos a esto factores diversos que afectan la producción, distribución y
comercialización de F&H, como problemas de cosecha, embalaje, transporte y
cadena de frío, (por ej., el transporte de frutas y hortalizas no cumple con
las normas internacionales, existe una alta putrefacción, escasez de
combustible, una precaria relación tecnológica entre supermercados y
productores, elevadas pérdidas a nivel minorista que no se han estimado
oficialmente, controles exagerados en alcabalas nacionales intra e
interestatales en las que los camiones son retenidos para revisión de
carga y de guías de movilización por sospecha de contrabando, corrupción en las
alcabalas, retención por conatos de saqueos, etc., todo lo cual redunda en
escasez, altos precios y baja calidad de las F&H expendidas.
El
lema “5 al día”, es mundial y forma parte de campañas educacionales en muchos
países de 4 continentes, independientemente de su categoría como países de
ingresos altos, medios o bajos. Es un tema de salud y nutrición, y se predica
el “deber ser”.
Dado
el panorama de la enorme crisis alimentaria y nutricional, en el año 2018,
durante la Asamblea General de AIAM5 en el marco del XIV Congreso
Internacional de Promoción al Consumo de F&H. Prevención de pérdidas y
desperdicios de alimentos, realizado en México, la Fundación “5aldía
Venezuela” informó con gran pesar que dada la dramática situación alimentaria,
nutricional y económica del país, promover el consumo de F&H se convierte
en una empresa irreal que puede resultar cruel y hasta burlesca, por lo
inalcanzable para gran parte de la empobrecida población venezolana dada la
rampante hiperinflación, sus elevados precios y su ausencia de los programas de
distribución de alimentos del gobierno. Mucho menos promover 5 porciones cuando
a la población más vulnerable le cuesta hasta comprar un (1) huevo.
Esta es otra tragedia
para la nutrición del venezolano.
Fuente:
FRUTAS Y HORTALIZAS TAREA PENDIENTE PARA LA NUTRICIÓN EN VENEZUELA
ResponderBorrarLa nutrición como parte fundamental en el bienestar de los seres vivos, se ha visto afectada en estos tiempos donde la tecnología avanza a pasos rampantes, puesto que el fomentar e implementar maneras de consumir alimentos sanos para el funcionamiento de nuestro cuerpo se ha convertido en una montaña rusa con su cimas y desniveles, ya que muchas personas a nivel mundial no tienen un acceso seguro a los alimentos, teniendo como consecuencia que los rubros como carne, pollo, huevos y pescado los cuales son altos en nutrientes sean reemplazados por alimentos menos nutritivos, quebrantando el cumplimiento de normas nacionales e internacionales, a lo cual se suma una disminución de producción de lácteos y los que se encuentran en el mercado no son de buena calidad, puesto que no aportan la cantidad de calcio y ácidos grasos suficientes característicos de estos productos.
Por ello, seguir la recomendación universal de una dieta balanceada y variada manteniendo presente todos los grupos alimenticios en proporciones adecuadas, es considerado una batalla que se libra a diario en el seno del núcleo familiar. No obstante, los venezolanos como personas carismáticas, buena vibra y cuyo ingenio esta a la vanguardia de crear maneras de estirar nuestros ingresos, hemos dedicado tiempo y recursos para suplir ciertos alimentos que por su precio, aporte nutricional y disponibilidad son difíciles de adquirir, y que mejor manera de hacerlo que cosechar nuestros alimentos teniendo en mente que más fresco es mejor ya que no hay nada mejor que un producto proveniente del cuido y amor de quien lo cultiva.
Debemos de estar al tanto de lo que comemos, la cantidad, y los horarios. Contenta de este gran artículo. Yoharlys Espejo
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