La historia de la nutrición en
Venezuela se remonta, de acuerdo a los expertos, desde finales del Siglo XIX y
comienzos del XX. Sin embargo, en razón del surgimiento de temas e
investigaciones sobre nutrición en publicaciones científica, medios de
comunicación e instituciones dedicadas a su estudio, es a partir de la Segunda
Guerra Mundial, que se considera como el punto de surgimiento de esta
disciplina.
En el caso venezolano, la labor oficial en nutrición surge
a partir de la creación de la “Comisión Nacional de Alimentación” en el
Ministerio de Sanidad y Asistencia Social en el año 1937. Arturo Guevara publica la obra “El poliedro de la nutrición” el cual se
constituye en el primer estudio que contiene un esbozo histórico de nuestra
alimentación presentando una visión del problema de la nutrición en aquellos
años y le siguen las obras del Dr. Fermín Vélez Boza: “La alimentación en la edad escolar y pre-escolar”,
en Edasi
No 115, mayo de 1945. En esa misma revista en octubre de 1945, publica otro
trabajo titulado “Síndrome de
deficiencias nutritivas en un grupo de escolares”, y en abril de 1948,
escribe sobre “La alimentación y
nutrición en Venezuela” en la Revista del Ministerio de Sanidad y
Asistencia Social, Vol. XII, 6-12, estudio
que incorpora lo histórico como elemento necesario para explicar la realidad
alimentaria venezolana.
En 1941 se crea la sección de
Nutrición en el Ministerio de Salud y Asistencia Social, cuya actividad
principal son las encuestas de nutrición. En 1946 se crea el Instituto Nacional
ProAlimentacion Popular (INPAP) y el Patronato de comedores populares. Sus
actividades se concentran en propuestas de información y educación alimentaria,
unidades móviles de información, producción y proyección de películas, prensa,
radio, clubes escolares, proyectos comunitarios, conferencias. En el INPAP se
consolidan una serie de iniciativas como el club familiar de nutrición, escuela
para cocineros y la escuela de cocina experimental. En 1949 se transforma en el
Instituto Nacional de Nutrición.
En 1950 se crea la Escuela de
Nutrición y Dietética que permitió la extensión de las actividades de nutrición
en el ámbito nacional. El 18 de Noviembre de 1951 se celebra por primera vez el
“Día de la Alimentación”.
En estos años se inician en
Venezuela las investigaciones bioquímicas y de nutrición clínica, se cuenta con
la tabla de composición de alimentos, encuestas de consumo, la hoja de balance
de alimentos, los primeros requerimientos calóricos de la población venezolana,
se forman centenares de profesionales nutricionistas y dietistas y se hacen los
primeros ensayos para la elaboración de un producto alimenticio destinado a los
niños preescolares desnutridos.
En 1958 se reestructura el
departamento de Educación y Divulgación en Servicios de Educación y Docencia,
para darle prioridad a las actividades escolares de nutrición, a través de los
clubes escolares de nutrición y de la educación alimentaria dirigida a la población
en general por prensa, radio y publicaciones. En 1960 el INN publica la escalerilla de la
alimentación, los grupos de alimentos y se implementa la primera guía de
alimentación para el menor de 1 año. En 1973 se decreta como instituciones
escolares, los clubes de nutrición y, en 1977, se declararon las cantinas escolares como servicios de
primera necesidad, con la lista de alimentos recomendados por el INN.
Igualmente se incluyó el tema de nutrición en los contenidos del área de salud
de la escuela primaria.
En 1983 se editaron por parte del
Ministerio de la Familia, una serie de manuales educativos de estimulación,
nutrición y salud para el niño de 0 – 4 meses para facilitadores y madres en la
serie “Aprendiendo y Enseñando”. En
la década de los Noventa se desarrollan las
guías de alimentación para la población y para la escuela, producto del
trabajo conjunto de la Fundación Cavendes-INN-CENAMEC, universidades e
instituciones privadas.
En 1992 se realiza un diagnóstico
de la enseñanza de la alimentación en
la Educación Básica Venezolana a cargo de las profesoras Diana de Barboza y
Dalia Diez de Tancredi, ambas del CENAMEC donde se reportan deficiencias en el
proceso de enseñanza de los contenidos de alimentación y nutrición por la falta
de recursos y materiales instruccionales, por la deficiencia existente en la
formación docente, la carencia de espacios físicos y ambientes apropiados, de
equipos, herramientas y bibliotecas.
En el año 2001 el Instituto
Nacional de Nutrición, en una revisión de las acciones sobre alimentación y
nutrición desarrolladas en el país desde las década de los años 1940 y ante las
perspectivas del siglo XXI, destaca en primer lugar los programas desarrollados
y dirigidos a la población infantil, preescolar y escolar: a) lactancia materna;
b) programa especial de merienda; c) programa de alimentación escolar (PAE); d)
comedores escolares; e) beca alimentaria; f) hogares de cuidado diario; g)
servicio de educación y recuperación nutricional; y h) guías de alimentación en
la escuela y para menores de 6 años. Y en segundo lugar, entre las razones por
las cuales dichas políticas, planes y programas no han cumplido
satisfactoriamente sus fines y metas se encuentran: a) no se ha formulado un
política nacional de alimentación y nutrición debidamente coordinado de manera
interinstitucional; b) no existe un grupo interinstitucional e
interdisciplinario acerca del análisis de la situación alimentaria y
nutricional del país de manera periódica en la reformula de acciones; c) falta
de un política agresiva de educación e investigación nutricional; y d) los
programas ejecutados, no han contemplado un seguimiento y la evaluación de
manera oportuna; por lo tanto, se ha observado una falta de focalización de la
población objeto, incumplimiento de normas técnicas y administrativas,
solapamiento de programas etc.,
En el año 2002 el INN edita la
serie “Nutrición Comunitaria” y recientemente en el año 2011, publica la
colección “Nutriendo Consciencias”
compuesta de 7 libros orientados a: Lactancia Materna, el Trompo de los
alimentos, Alimentación en el Nivel de Educación Inicial y Educación Primaria,
Manipulación Higiénica de los Alimentos, Publicidad y Alimentación, Marco Legal en la alimentación.
En el año 2008 la Fundación Bengoa, desarrolla una investigación
a fin de actualizar la problemática nutricional del país. Para ello realiza un
estudio por encuesta, a especialistas e investigadores y un análisis a
profundidad a través grupos focales. De estos trabajos se jerarquizaron un
conjunto de situaciones problemáticas fundamentales dentro del tema de la
alimentación y nutrición: 1° la educación y falta de información, 2° la forma
como se comunica la información, 3° desconocimiento de los micro nutrientes, 4°
deficiencias de micro nutrientes (hierro y ácido fólico), 5° el consumo de
grasas, 6° contraste entre el déficit y el exceso (desnutrición y obesidad), 7°
la lactancia materna, 8° la oferta de productos, 9° la estructura saludable de
la dieta y 10° la higiene. En conclusión de los participantes, el problema
nutricional del país es complejo debido a la multiplicidad de factores
predisponentes y determinantes del entorno, se requiere en tal caso, ser
abordados a través de sólidas políticas públicas.
En el desarrollo de la Educación Alimentaria y Nutricional, las
escuelas de nutrición y dietética han tenido una función preponderante desde su
fundación en la UCV en 1950, LUZ en 1967 y en la ULA en1971. Ellas desempeñan
una importante labor al incorporar el tema de salud pública y educación en nutrición
así como en el diseño de estrategias educativas y su aplicación en las
comunidades durante su formación.
Pero a medida que avanza el
interés por la alimentación y nutrición de la población venezolana, aparecen
nuevos actores, que cubren algunos vacíos de información. Entre ellos el Centro de Atención Nutricional Infantil de
Antímano (CANIA), la Fundación José María Bengoa para la Alimentación y
Nutrición y la Fundación Cinco al Día.
En forma particular, el Centro de Atención Nutricional
Infantil de Antímano (CANIA), es una institución privada, patrocinada por
Empresas Polar, que desde el año 1995 se dedica a la prevención y atención
integral de la condición nutricional infantil y familiar, la producción de
conocimientos y la capacitación en salud nutricional, y áreas relacionadas para
lograr cambios positivos sostenibles en la comunidad en general. Desarrolla programas
en nutrición comunitaria, se constituye en un centro de capacitación y
educación continua en nutrición, investigación en nutrición clínica y
comunitaria, ejecuta programas de atención a la malnutrición y de desarrollo
comunitario. Edita el Boletín de Nutrición Infantil, publicación bianual
dirigida a médicos, nutricionistas, educadores y psicólogos, que tiene entre
sus objetivos difundir estrategias de prevención, abordaje integral y manejo de
la malnutrición infantil, así como actualizaciones sobre temas de interés en el
aula, nuevas publicaciones, eventos y noticias relacionadas con la
nutrición.
De igual forma, la Fundación Bengoa, organización social
sin fines de lucro, de acción pública, creada en el año 2000. Se orienta a
promover y desarrollar estrategias y acciones para mejorar la alimentación y
nutrición de los venezolanos, en especial los grupos más vulnerables: niños y
mujeres. Tiene entre sus objetivos apoyar la formalización y actualización en
alimentación y nutrición de profesionales, docentes, organizaciones sociales y
comunidades. Entre sus programas se destacan: Faro Nutricional: contribuye al
monitoreo del estado nutricional de los venezolanos; Información y Difusión: a
través del cual promueve el acceso de la población a los conocimientos de
alimentación y educación nutricional, además
de difundir la producción científica de los profesionales venezolanos a
través de la Revista “Anales Venezolanos
de Nutrición”; Asistencia Técnica y Capacitación: pretende el desarrollo y
fortalecimiento de capacidades de profesionales y técnicas del área de
alimentación y nutrición, de organizaciones sociales, grupos comunitarios y
empresas.
Sin embargo, se observan
debilidades, falta de cohesión y hasta improvisación en muchas acciones
emprendidas, que crean situaciones de gran incertidumbre en los ejecutores de
los programas. En este sentido, con frecuencia se solicita al docente que
eduque en nutrición, pero se obvia que su formación en esta área tiene
debilidades conceptuales y en la aplicación de estrategias innovadoras de
aprendizaje, así como en la incorporación de las nuevas tecnologías de
información y comunicación.
Fuente: Maritza
Landaeta-Jiménez. Apuntes para la Historia de la Educación en Nutrición. En De
Tejada y col, (2013). Educación
Nutricional para un desarrollo sostenible. FEDEUPEL. Caracas.
EXCELENTE ARTÍCULO
ResponderBorrarEXCELENTE ARTICULO, ES NECESARIO ESTABLECER LA HISTORIA CON LA GEOGRAFIA Y DARLE A NUESTROS HIJOS EL SENTIDO DE PERTENENCIA
ResponderBorrarGRACIAS
Gracias por su comentario. Destacamos el valor de la cocina como encuentro de la historia, la geografía, la tradición, la innovación. La Educación debe participar del encuentro.
Borrar